Cuando nos adentramos en un bosque, esté donde esté y sea o no frondoso, casi siempre nos envuelve el misterio o la inquietud, incluso el miedo. Me atrae esa sensación de no saber qué voy a descubrir tras el siguiente árbol o en aquellos otros más adelante. Pretendo que quien mire mis fotografías juegue a adivinarlo conmigo